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El DIM nada que mejora

El DIM mejoró muy poco sin Bolillo en el banco. Óscar Pérez no improvisó y alineó los 11 jugadores que eran. Con esto quedó demostrado que el equipo tiene unos vacíos enormes en algunos puesto.

Dairo Mosquera único lateral izquierdo con el que cuenta el equipo no está en un gran nivel. No es una salida segura y arriesgó muy poco, pero no podemos desconocer que el único centro que hizo sirvió para la anotación de Cleider Alzate.

Otro punto negro del equipo es Felipe Pardo (menos mal el próximo semestre no sigue en el equipo) Pardo no sintoniza con el ataque, interrumpe las jugadas, no se sabe asociar con Giovanni Hernandez, siempre simula faltas, no define los mano a mano y no es inteligente con el balón. 

Hablando del partido, el DIM jugó un poco mejor, pero solo un poco. Santa Fe entró a la cancha frio y así estuvo todo el partido. Omar Pérez caminando hizo jugar a todo el equipo y con muy poco el los Bogotanos se llevaron un empate.

Lo mejor del Poderoso fueron German Cano, que juega cada balón a muerte y Castellanos, que es un grande en el arco. 

El medio campo del equipo no está conectado, Giovanni y Cleider aún no se entienden a la perfección, Cristian Restrepo y Amilkar son muy lento e imprecisos para entregar el balón y el aporte de los laterales es nulo. 

Para el juego contra Nacional el equipo no contará con Herner (baja grave) Felipe Pardo (gracias a Dios) y a Cristian Restrepo (espero el debut de La Goma Hernández)

El Medellín sigue último a tres puntos de Alianza Petrolera. Los partidos que siguen son verdaderas finales.

La hinchada poco a nada cree en el Medellín

Bolillo, más corazón que táctica

Foto tomada de: http://www.dimoficial.com/

Cuando nombraron a Hernán Gómez como técnico del DIM, la hinchada se emocionó y se ilusionó. Llegaban nuevos aires, Ciro salía de la presidencia del equipo y la fe volvia a renacer. Me acuerdo del debut del Bolillo contra Santa Fe, un pálido empate y el equipo no mostró mejoría. Luego visitó al Huila y el Medellín perdió, ese día el Bolillo aseguró que nunca había dirigido un equipo tan malo. Los resultados en el semestre 2012-1 fueron perversos, pero la hinchada y los medios no se desesperaron porque todos tenían fe.

Para el segundo semestre del 2012 el Medellín contrató 14 jugadores, todos con el aval del técnico.  Primer partido contra el Pasto y el equipo ganó 2-0, la alegría volvia a la tribuna y nadie dudaba de la capacidad del Bolillo. Luego empezó una persecución de los árbitros hacia el equipo. La mano del Huila que no fue sancionada, la supuesta mano de Arias frente a Nacional que significó el empate en el último minuto, la sanción indiscriminada contra el Bolillo y el presidente Julio Roberto Gómez.

A pesar de no tener una nómina competitiva y demostrar un juego mezquino, apatico y defensivo, el equipo logró llegar a la final, la jugó mano a mano y perdió desde el punto de penal.

Para el 2013-1 el equipo contrató a nueve jugadores, solo uno de ellos es titular, se esperaba que el equipo mejorará en la forma de jugar, el hincha se ilusionaba con un equipo que organizado, con entrega, que diera espectáculo, pero pasó todo lo contrario, el equipo siguió mostrando su juego defensivo y tacaño con la diferencia que esta vez no se conseguirían los resultados. De 33 puntos disputados solo consiguió 9, marcando 8 goles en 11 partidos y recibiendo 11.

El Bolillo estaba ciego por su terquedad. Insistió con jugadores que no deberían jugar en una plantilla profesional. William Zapata jugador fundamental en el 2012, no demostró ninguna actitud para jugar, la insistencia con Felipe Pardo, Cristian Restrepo, John Viáfara, jugar con un solo delantero, improvisar con un lateral derecho y otros tantos errores.

En el último partido del Bolillo -que le costo su salida- presentó un equipo con 3 centrales, 3 volantes de recuperación y un solo delantero, además, William Zapata fue titular. En el segundo tiempo y perdiendo 2-0, el técnico realizó tres cambios de forma irresponsable, el equipo mejoró un poco pero no fue suficiente y al final se perdió 3-2, dejando al equipo en la última posición en la tabla del descenso, motivo suficiente para que las directivas del DIM tomaran la decisión de apartarlo del cargo junto con su equipo de trabajo.

El legado del Bolillo fue poco, dejo un equipo con la moral abajo, una hinchada desmoronada y con el nombre de la institución por el suelo. 

Ahora solo queda mirar el futuro, sumar todos los puntos que se puedan en las últimas fechas y jugar un segundo semestre a muerte. 

Clásico apático

El primer tiempo del clásico no dejó emociones, ninguno de los dos equipos realizó un disparo al arco y la táctica predomino sobre el espectáculo.

 Bolillo -en su eterna terquedad- alineó como titular a Wiliam Zapata, quien fue sustituido antes de terminar el primer tiempo por Felipe Pardo. El DIM salió con una línea de 4 y más adelante tres volantes de recuperación, el equipo entró a la cancha a no atacar y tampoco a dejar jugar al rival.

Ya en el segundo tiempo ingresó a Cleider Alzate por Julian Guillemo y hubo un gran cambio en la parte ofensiva. En el segundo tiempo las mejores opciones fueron para el DIM, todas de media distancia, Giovanni y Cleider formaron una gran dupla que logró desestabilizar a la defensa del Nacional.

Otro cambio que le dio un respiro al equipo fue el ingreso de Dairo Mosquera por Jorge Arias. Mosquera es lateral neto y no como Arias que esta improvisando en esa posición. Los 11 que terminaron el partido deben ser los titulares de ahora en adelante. 

Faltando 5 minutos para terminar el partido, el arquero Luis Martínez, cometió un grosera falta dentro del área contra Diego Herner que el árbitro Óscar Gutiérrez increíblemente no sancionó, más sorprendente aún es que Germán Cano no aprovechó que el arquero estaba vencido y descacho el disparo.

Los último minutos fueron de tramite, el partido quedó igualado a cero pero el Medellín dejo mejor imagen que su rival.

 Poco que decir en un partido donde predomino el bostezo.

De cara al descenso

En tan solo dos minutos el Deportivo Pasto sentenció el partido contra el DIM. Un descuido de la defensa y Luis Páez, que no marcaba desde la segunda fecha, convirtió el único tanto del partido.

El Poderoso completó la quinta derrota y es el equipo que más veces ha salido derrotado en la Liga Postobón.

Antes del partido existía un gran optimismo pues el equipo llegaba con dos victorias al hilo, parecía que el Bolillo había encontrado el equipo ideal, pero sorpresivamente William Zapata pasó de no ser convocado a titular, dejando en el banco de suplentes a Cleider Alzate y sin socio a Giovanni Hernández.
Con el marcador en contra, el DIM adelantó las líneas he intentó llegar por las bandas, pero la incapacidad de juego colectivo y los errores individuales a la hora de entregar el balón hicieron el trabajo fácil a la defensa pastusa.

Las jugadas más claras fueron un centro de Giovanni que Mena no pudo cabecear y un remate de media distancia de Bocanegra.

En el segundo tiempo el Bolillo ingresó a Cleider por Pardo y el equipo tuvo más el balón, fue más organizado a la hora de atacar pero no pudo concretar.

Como el Poderoso estaba jugado al ataque, el Deportivo Pasto apostó al contragolpe y tuvo varias opciones clarísimas para aumentar el marcador, sin embargo el Medellín cuenta con Castellanos que hace ver lo difícil fácil.

En el minuto 62 Hernán Darío sacó a Jorge Arias -de regular partido- por Dairo Mosquera, buscando más salida por el costado izquierdo pero Mosquero mostró un bajo nivel futbolístico y no hizo un centro bueno.
En los últimos 10 minutos del partido llegaron las opciones más claras. En el minuto 82 Diego Herner aprovechó un rebote que dejó el arquero Lucero para anotar el empate, pero el árbitro decidió anular por supuesta falta sobre el arquero.

Sin embargo Cleider Alzate tuvo las opciones más claras, dos mano a manos con el portero que no supo definir y estrelló el balón con el cuerpo de Lucero.

Al final queda la impotencia de otro partido perdido por una desconcentración en el primer minuto de juego y la incapacidad para marcar un gol. En 90 minuto de juego el goleador Germán Cano no realizó un disparo al arco, Viáfara y Zapata no encajan en el equipo y los laterales no aportan en el juego ofeensivo.
Con esta derrota el Medellín quedó en zona de descenso, suma tan solo 7 puntos en ocho fechas. El equipo del semestre pasado con menos figuras y problemas económicos lograba mejores resultados –jugando igual de mal- . El Bolillo no encuentra el equipo ideal y el trabajo que se realiza en semana no se ve reflejado para nada en la cancha.

Ahora se viene el clásico, partido que puede ser decisivo en el futuro del equipo.